La llamamos La Compañía y es una de las iglesias más socorridas del estado, porque aquí cada domingo se realizan pláticas bautismales y confirmaciones, sobre todo para adultos.
Se empezó a construir desde 1581 bajo la orden de los Jesuitas y año tras año fue creciendo, empezó con un pequeño templo, creció a una torre y un panteón al frente, hasta la construcción actual que consta de tres naves, dos torres, un pórtico, sacristía, oficinas, salones y la tumba de la China Poblana (Catarina de San Juan). Todo edificado en dos etapas: de 1581 a 1600 y de 1746 a 1767, para dejar ornamentos de yesería, figuras, estatuas y detalles de la época barroca.
El templo destaca arquitectónicamente por dos cosas: su pórtico, que tiene tres arcos al frente dedicados a un santo cada quien; su altar principal, porque tiene 12 figuras de los apóstoles hechas de madera y al centro la imagen en óleo de un Jesucristo.
Templo del Espíritu Santo
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La experiencia
Si eres fotógrafo vives o visitas Puebla tienes que venir aquí obligadamente, con mucho tiempo y estar atento a los detalles. Muy cuidadoso porque si no te perderás la tumba de la China Poblana, tal como me pasó a mí. Para ello te recomiendo que vayas entre semana como a eso de las 11:00 horas, la luz que entra es muy buena para iluminar las figuras y no habrá mucha gente que haga sombra dentro de la toma.
Cuando entres no tomes fotos enseguida, ve a la derecha para caminar por el pasillo y ve las variadas figuras que existen, al llegar al frente ve los santos arriba, agacha la mirada para ver las tumbas de las personas enterradas ahí. Sigue por el otro pasillo, el de la izquierda, y sigue viendo los detalles. Ya que hayas llegado al punto de partida, ahora sí, saca tu cámara y ve por el pasillo central asechando la mejor toma, tienes arcos, personajes, perspectivas y un sinfín de motivos a retratar.
Si no tuviste la fortuna, fuiste en fin de semana a eso de entre 10:00 y 12:00 del día también es una experiencia porque ahí tomarás gente, así que llévate un zoom y toma las caras de alegría, pena, asombro, nervios y enojo porque el templo estará repleto de personas de diferentes edades estando en pláticas y en confirmación, que se vuelve un banquete para aquellos que les gustan los retratos.
Lo que sí, sea cual sea el día y la hora, alza la cara. Arriba hay muchos aspectos que ver, seguramente saldrás animado a seguir en la fachada, que como pocas está en tono bicolor, debajo de piedra gris y arriba de blanco. Ya para concluir tienes dos opciones, a la derecha está el edificio de junto que pertenece a la universidad pública o a la izquierda, unas nieves de varios sabores para calmar la sed y el calor.
