top of page
Hermanos Serdan.JPG

MONUMENTO

hermanos

a los

SERDÁN

Hace 109 años estos hermanos marcaron el rumbo del país con sus palabras. Carmen, Máximo y Aquiles dieron su vida para que una nación se diera cuenta de que debía despertar para tener un futuro mejor. Entre que sí y que no, la historia marca que el 18 de noviembre inició la guerra de la Revolución Mexicana.

Para honrar su imagen, años después se decidió construir un monumento acompañado de una fuente en medio de una rotonda sobre el bulevar San Felipe y la 37 Norte. Lugar que marca el inicio de la avenida que también lleva su nombre y que culmina en la conexión con la pista hacia la Ciudad de México.

El monumento a los Hermanos Serdán es obra de Armando Figueroa y Moisés del Águila, criticados por edificarlo con una baja calidad escultórica, pero con altas características visuales, pues la rotonda permitía visualizarlos plenamente desde cualquier punto. Además el jardín y la fuente de diferentes niveles que conducen hacia las figuras tienen la altura ideal para no estorbar.

Lo reprochable son las proporciones y expresiones; en los tres, las cabezas y las manos son más grandes en relación al resto del cuerpo, mientras que Carmen y Máximo tienen una complexión pequeña, Aquiles parece mejor trabajado. Detrás de ellos hay una torre triangular, cuya cúspide está adornada por una figura femenina que teóricamente simboliza a la Patria, otra cosa cuestionable porque no tiene mucha forma y las proporciones se ven muy raras desde abajo.

Si hablara de la base, esta es de piedra y al frente sostiene el escudo nacional en relieve de mármol blanco, sobre ella hay otra placa donde están empotradas las figuras de los hermanos. Dato curioso es que detrás hay una capilla, que se cuenta está abierta en el aniversario luctuoso, pero jamás he entrado o sabido de ella.

La experiencia 

Si logran llegar se darán cuenta que no tardarán más de 20 minutos ahí. Tienen tres posiciones para admirar el monumento: 1) manejando desde el boulevard; 2) enfrente de la fuente; 3) subiendo la escalinata. Las últimas dos son las más recomendadas porque apreciarán como tal el monumento, la primera se entorpece porque el gobierno tuvo la magnífica idea de rodearlo con una ciclopista que pocos usan, no porque no quieran sino porque asaltan; entonces de lejos solo verán una estatua que distinga el punto.

Una vez que dieron la vuelta, es momento de irse porque serán abordados por policías o ladrones, pues al estar escondido y ser un lugar de vías rápidas las dos actividades son fáciles de hacer.

Su legado debe trascender de los nombres de las calles, hacía la ideología de todos los poblanos.
!
Widget Didn’t Load
Check your internet and refresh this page.
If that doesn’t work, contact us.
bottom of page